El comercio electrónico es, por definición, la compra y venta de productos en línea. Las empresas de impresión están recurriendo cada vez más al comercio electrónico para dirigirse a las personas que día a día desean un autoservicio y una forma más cómoda de adquirir productos en sus ocupadas vidas. Actualmente, muchos clientes están en línea y el número de usuarios que compran a través de Internet está creciendo sustancialmente. Este fenómeno fue impulsado por la pandemia y a obligado a las imprentas a tener la capacidad de ofrecer un servicio eficaz de comercio electrónico para recibir pedidos, de tal manera que puede situar a una empresa de impresión por delante de sus competidores. Este enfoque desafía el pensamiento tradicional de que una imprenta es solo un negocio presencial o atendido directamente por vendedores. Es por esta razón que a medida que aumenta el número de empresas que se mueven en línea para satisfacer las necesidades de compra de sus clientes, también deben hacerlo los proveedores de servicios de impresión.
El comercio electrónico permite a un cliente pedir cualquier producto las 24 horas del día sin tener que moverse de su sitio. Ofrecer pedidos en línea tiene otros beneficios además de aumentar las ventas. Puede ayudar a una empresa a conocer mejor a sus clientes y a seguir las tendencias de compra. Además, los pedidos en línea permiten a las empresas de impresión ofrecer a sus clientes productos y servicios adicionales que pueden no surgir en las conversaciones durante las formas tradicionales de adquisición de productos de impresión. También permite poder complementar la propuesta de valor con opciones de personalización donde los clientes participan en el diseño de los productos.
¿Cuántas compras se hacen fuera de línea?
Para el común de las personas es muy poco. La mayoría de las compras hoy en día se hacen en línea, donde el pedido es hecho desde el celular y este llega a la puerta de su casa. Grandes sitios de comercio en línea como Amazon, han marcado una tendencia en la forma en que las personas compran sus productos, creando un modelo que muchas industrias y empresas están siguiendo, dando como resultado el auge del comercio electrónico.
¿La industria gráfica va por el mismo camino?
No todos los negocios pueden llevarse a cabo en línea, ya que cuanto más complejo sea un proyecto, más se beneficiará una empresa de ofrecer sus servicios y experiencia en las comunicaciones tradicionales cara a cara. El comercio en línea significa para cualquier industria la capacidad de adelantarse a la competencia utilizando las tecnologías de Internet, la cual ayuda a solidificar la relación de una empresa con sus clientes. Por ejemplo, aunque los clientes compren productos fuera de Internet, es probable que primero investiguen en la red. Por lo tanto, una empresa puede utilizar los valiosos datos generados durante esta navegación que hacen los clientes para mejorar en gran medida su capacidad de evaluar y gestionar su negocio y ofrecer productos y servicios acorde con ello. Cuando los clientes hacen pedidos, las empresas pueden analizar la frecuencia de esos pedidos, las tendencias de compra de sus clientes y qué productos tienen más éxito que otros. La recopilación de datos es la ventaja más importante que tienen los pedidos en línea con respecto a los pedidos tradicionales fuera de línea. El uso de un sistema de comercio electrónico permite a una empresa de impresión conocer mejor qué, cuándo y cómo hacen los clientes sus pedidos. Las tecnologías online permiten a una empresa con el análisis de los datos, ampliar más que nunca la efectividad del portafolio de los productos y servicios que ofrece para aumentar el volumen de ventas, el margen de contribución y el precio promedio del ticket de compra.
Beneficios para una empresa del sector gráfico
El principal beneficio de implementar el comercio electrónico en una empresa de impresión es la satisfacción del cliente y el tener un canal de ventas para generar ingresos. Esto se debe a que los clientes ya no tienen que llamar o reunirse físicamente con un representante de ventas, ya que ahora tienen la posibilidad de pedir sus materiales impresos en cualquier momento del día y desde cualquier lugar. Hoy en día, muchos clientes no se sientan detrás de un escritorio durante toda su jornada laboral, y el establecimiento de un servicio en línea permite a una empresa dirigirse a esos clientes que se desplazan y que necesitan pedir impresión.
Un aspecto a considerar es que para los clientes el comprar en línea supone una entrega más rápida, lo que hace necesario que las imprentas revisen sus procesos, eliminen cuellos de botella y piensen en opciones de automatización.
Otros de los muchos beneficios para las empresas es la posibilidad de hacer un seguimiento de los pedidos en tiempo real, lo que les ayuda a predecir futuras tendencias de compra. Esto es especialmente beneficioso para los clientes que desean imprimir artículos según sus necesidades. Con esta información, la empresa puede ayudar a un cliente a determinar la cantidad de ejemplares que debe imprimir en la siguiente tirada con la mejor relación precio – cantidad.
Por último, el comercio en línea permite a la empresa de impresión tener un mayor control de gestión de sus empleados, en el número de ventas, seguimiento de sus clientes y todos los procesos relacionados.
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